Ana Extremiana: “La danza necesita un diálogo continuo con las administraciones para que se involucren en nuestras necesidades y no a la inversa”
Dotar de las herramientas necesarias para poder llevar la danza valenciana al mercado exterior ha sido el objetivo de Misión Inversa: Redes y plataformas de internacionalización, que concluyó el pasado martes tras varios días de actividades, ponencias, un show case e intercambios “face to face” con programadores de danza llegados de todo el mundo. Una iniciativa promovida por la Asociación Valenciana de Empresas de Danza (AVED) y organizada y patrocinada conjuntamente con el Instituto Valenciano de la Competitividad Empresarial (IVACE), CulturArts, la Fundación SGAE y con la colaboración del Centre de Cultura Contemporània Octubre y la Universitat de València.
Ana Extremiana, presidenta de AVED, hace un balance “muy positivo” de esta primera misión que ha facilitado “visualizarnos como sector y colectivo, conocer nuestra situación actual y trazar un diagnóstico de nuestras carencias y necesidades a la hora de internacionalizar la danza”. Cimentar las bases en el lugar de origen de las compañías y crear una estructura sólida, destaca, “es la única vía para transitar luego hacia una internacionalización, algo que se ha puesto de manifiesto en los diversos encuentros y seminarios con los programadores invitados”. Articular una buena cimentación, subraya Extremiana, pasa por “tener un sector muy compacto en el que sepamos lo que necesitamos, interconectar con otras plataformas locales, nacionales e internacionales para crear un trabajo en red, y tener un diálogo continuo con las administraciones públicas para que se involucren en la medida de nuestras necesidades y no a la inversa”.
Una “programación expandida” es otra de las claves para dar visibilidad a la danza fuera de nuestras fronteras: “Este tipo de programación conlleva no sólo llevar una espectáculo a otro país, si no generar con éste un diálogo y un intercambio que vaya más allá de la pura representación, ya sea mediante talleres o encuentros que generen una conexión y dejen huella, al tiempo que sea bidireccional y recoja una misión inversa”, señala la presidenta de AVED.
La pluralidad de los perfiles de los programadores invitados, procedentes de festivales y plataformas de Israel, Alemania, Holanda o Eslovenia, y los diferentes formatos que contempla cada centro en sus programaciones ha servido, según Extremiana, “para que las compañías sepan a qué puertas llamar y a cuáles no, ya que la mayoría de las ferias suelen apostar directamente por los formatos grandes y no todas las piezas encajan en este modelo”.
Respecto al seminario, “Las artes escénicas valencianas en Iberoamérica”, impartido por el presidente de Iberescena en España y Premio Nacional de Teatro, Guillermo Heras, Extremiana destaca “la gran acogida” que ha tenido por parte de los profesionales del sector y su carácter pedagógico y didáctico, “que ha facilitado a las compañías de danza, teatro y circo conocer los mecanismos a seguir para poder abrirse paso en el mercado iberoamericano”.
Continuidad
Misión inversa: Plataformas y redes de internacionalización ha sido una primera aproximación de la danza valenciana a los mercados exteriores, pero requiere una continuidad, sostiene Ana Extremiana. “Ésta ha sido una edición piloto que ha creado el tejido para seguir incidiendo y apostando por las estrategias de internacionalización, y desde AVED hemos visto que es viable, pero para ello es necesario la firme involucración y financiación de las distintas administraciones”.
