La Policía Local se moderniza con pistolas eléctricas paralizantes
Con estas pistolas, los agentes podrán inmovilizar a una persona o animal a través de los dardos que administran una descarga eléctrica y que tienen un alcance máximo de 7,6 metros
El coordinador general de Seguretat Ciutadana, Javier Reig, y el Jefe de la Policía Local de Gandia, Marc Cuesta, han comparecido en rueda de prensa para presentar la adquisición de dos pistolas de impulsión eléctrica, conocidas como táser, que responde al interés del Gobierno de seguir en marcha con el plan de modernización de la Policía Local.
Se trata de un arma paralizante de electrochoque que dispara agujas que administran una descarga eléctrica, a través de un cable que permite un alcance de hasta 7,6 metros, provoncando la inmovilización durante unos cuatro minutos. El táser dispara dos dardos que contienen los electrodos que se conectan con el arma mediante unos alambres de metal. El arma envía las cargas eléctricas a los electrodos que al ser proyectados sobre una persona controlan los músculos motores incapacitándola. Los últimos diseños, como los adquiridos por la Policía Local de Gandia, son capaces de traspasar un chaleco anti-balas.
Como ha explicado el coordinador general de Seguretat Ciutadana, “se utilizará en caso de personas que quieran suicidarse; ante individuos que muestren un arma blanca; animales sueltos de grandes dimensiones que supongan un peligro; en caso de enfermos psíquicos peligrosos; o personas que, tras cometer un delito, no respondan a las órdenes de los agentes”. Según ha indicado el Jefe de la Policía Local, “se han dado casos en los que se produce una agresión o se genera un peligro para la integridad física del agente, pero ante esas situaciones no está justificado el uso de armas de fuego”. Situaciones que se pueden evitar con estas pistolas que funcionan con impulsos eléctricos. Cuesta ha explicado que “el táser genera en vacío 50.000 voltios, pero en contacto con la persona cae a 400 voltios con una corriente de 2,1 miliAmperios, lo que hace que no sea letal”. En este sentido, según un estudio del Instituto de Medicina Legal de Málaga, “tienen la consideración de arma no letal por la poca intensidad de la descarga producida” ya que el efecto letal de la corriente eléctrica depende de la intensidad y no del voltaje.
El Jefe de la Policía Local ha indicado dos motivos que justifican esta apuesta: “por la seguridad que no producirá ninguna lesión en la persona, y porque el arma dispone de cámara de vídeo y audio que se pone en marcha nada más conectarse la pistola eléctrica”. Esto permite utilizar la grabación como prueba ante un Juzgado. Además, estas pistolas eléctricas llevan incorporada una linterna que facilita la actuación.