Pervertido a prisión: condenado en Alicante por abusar sexualmente de su prima cuando tenía cuatro años
También realizó fotografías de tipo sexual a una hermana de esa víctima, también menor de edad
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a nueve años de prisión a un hombre que abusó sexualmente de una prima menor de edad y realizó fotografías de tipo sexual a una hermana de esa víctima, también menor de edad, imágenes que luego distribuyó en una página web de contenidos pedófilos.
La Sala le considera autor de un delito de distribución de pornografía infantil relativo a persona menor de 13 años y de un delito continuado de abuso sexual cometido respecto a la segunda de las niñas.
En ambos casos el Tribunal aprecia la atenuante de dilaciones indebidas. La sentencia le absuelve en cambio, por no considerarlo acreditado, de otro delito de abuso sexual respecto a la menor a la que tomó imágenes.
El hombre deberá indemnizar a una de las víctimas con 10.000 euros y a la otra con 5.000 y no podrá comunicarse con las menores ni acercarse a menos de 500 metros de ellas, su centro de estudios, domicilio y otros lugares donde ejerzan su actividad habitual por un tiempo de 10 años.
Los hechos comenzaron en 2014, cuando la primera de las víctimas tenía entre cuatro y cinco años de edad y el condenado aprovechó la relación de confianza que tenía ella, por ser su primo, y con la madre de la niña, que además de su tía era su madrina, para hacerle varias fotografías de contenido lascivo.
El condenado, que se ocupaba de la niña mientras la madre trabajaba, tomó las fotos en mayo de 2015 en la casa de sus padres, en un municipio de la comarca del Vinalopó Mitjà, o en una tienda de manualidades de una localidad de la misma comarca, que era de sus suegros. Las imágenes fueron detectadas en marzo de 2017 en una web de contenido pedófilo localizada en la red TOR de Internet.
La sentencia mantiene que, con anterioridad a estos hechos, entre los años 2011 y 2012, el hombre sometió a tocamientos en los genitales a la hermana de la primera víctima, cuando tenía entre 8 y 9 años. Según los informes forenses, la niña sufre ansiedad y otra sintomatología relacionada con un sentimiento de culpabilidad por no haber contado sus experiencias previas, lo que podría a ver protegido a su hermana.
La sentencia no es firme y se puede recurrir ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.